Verifica la legitimidad de la reventa de tu tiempo compartido y evita el fraude
La reventa y cualquier negociación de propiedades de tiempo compartido son un terreno fértil para estafas, representando un grave riesgo tanto para el patrimonio como para la tranquilidad de los propietarios. Estas estafas suelen comenzar con el contacto inesperado de un desconocido que afirma tener un inversionista dispuesto a pagar una suma excesivamente generosa por su propiedad.
En estas circunstancias, la reacción más adecuada sería declinar de inmediato cualquier oferta sospechosa. Sin embargo, si decides no descartar esa posibilidad, es imprescindible que sigas varias recomendaciones fundamentales: evita hacer pagos anticipados, resiste las tácticas de presión y verifica exhaustivamente la legitimidad de la operación, la documentación relacionada, el fideicomiso propuesto, así como la identidad de la empresa oferente y sus representantes.
La importancia de la verificación: ¿una herramienta infalible?
En los casos en que no hayas descartado de inmediato la posibilidad de una negociación de tu propiedad, la verificación es esencial en la prevención de estafas, ya que permite identificar señales de alerta de forma temprana. Sin embargo, es importante tener en cuenta que, aunque la verificación es un paso crucial, por sí sola no garantiza una transacción completamente segura. Existen múltiples factores que pueden escaparse del control de un proceso de verificación estándar.
Realizar una verificación rigurosa (y a veces incluso ligera) puede revelar discrepancias en la documentación, la legalidad de los oferentes o las garantías ofrecidas, lo cual debería llevar a considerar seriamente la conveniencia de continuar con el negocio. La regla de oro es simple: exige que todos los documentos y situaciones del oferente y del agente estén en orden y sean verificables. Cuando ello no se cumpla, no lo pienses dos veces: desiste de inmediato de cualquier posible negociación.
Utilidad de la verificación en la prevención de las estafas
La verificación es necesaria para la prevención de estafas. Pero, ¿es útil?
La respuesta no es sencilla pues, como ya se ha indicado, el proceso de verificación por sí solo no garantiza una transacción completamente segura y su grado de confiabilidad dependerá de los conocimientos y experiencia de quien la realice. Existen elementos, factores y circunstancias que no podrás verificar por tu cuenta y para cuya constatación requerirás de la asesoría profesional, sobre todo cuando tu país de residencia no coincide con el de tu propiedad o el de la sociedad oferente.
Sin embargo, la verificación si puede ser útil para la detección temprana de señales de alarma que te lleven a descartar la transacción.
Realizar una verificación inicial que te pueda llevar a detectar discrepancias e irregularidades puede hacer que te ahorres miles de dólares y mucho tiempo y dolores de cabeza.
¿Es rentable invertir en verificación?
Antes de invertir recursos en una verificación, el propietario debe evaluar si vale la pena el gasto en relación con el posible beneficio. En la mayoría de los casos, las propiedades de tiempo compartido tienen un valor de mercado muy reducido o incluso nulo. Por eso, determinar el valor real de la propiedad debería ser el primer paso para lo cual podrá acceder a sitios web como redweek.com o tugbbs.com o bien en ebay, entre otros. Esto no solo ayuda a identificar ofertas sospechosas, sino también a tomar decisiones basadas en hechos y no en ilusiones.
Si una oferta inicial ya muestra señales claras de ser poco confiable, gastar en verificaciones puede ser innecesario. Evalúa siempre el costo y el esfuerzo que implica la verificación frente al potencial beneficio de la transacción.
El propietario deberá decidir con base en su situación particular si vale la pena o no, asumir algún gasto en la verificación.
Limitaciones que encuentra el propietario en el proceso de verificación
El proceso de verificación en casos de reventa y otras negociaciones de tiempos compartidos presenta numerosos desafíos que impiden que pueda llevar a garantizar las transacciones como totalmente seguras. Esas limitaciones han sido explotados con éxito por estafadores. A continuación, se destacan algunas de las debilidades más comunes en el proceso:
1. Portales y aplicaciones engañosas
Existen portales que ofrecen servicios para buscar información de sociedades, personas y sitios web y evaluación de riesgos que, aunque pueden dar la impresión de ser confiables, pueden inducir al error, ya que los perfiles presentados sobre una compañía podrían señalarla como activa, con empleados e ingresos, incluso si esta ni siquiera existe o no está en operación como hemos tenido oportunidad de comprobar. Por otra parte, estos portales son inútiles frente a los casos de usurpación o suplantación de identidad.
Algunos de esos portales no ofrecen información actualizada y la mayoría de las aplicaciones dependen que se produzcan denuncias por parte de usuarios.
Ello lleva a la necesidad de confirmar toda información en distintos portales y aplicaciones cuando ello sea posible.
2. Suplantación de identidad
Empresas legítimas pueden ser víctimas de suplantación de identidad. Sin una verificación profunda, es posible caer en el engaño de estafadores que utilizan el nombre de estas empresas para dar legitimidad aparente a operaciones fraudulentas.
Esta circunstancia lleva a la necesidad de constatar no solo la regularidad de las empresas sino confirmar que sus representantes son quienes se presentan como tales y que su identidad corresponde con los representantes designados. Y ello no siempre se logra hacer.
3. Errores, datos desactualizados y falta de acceso en registros oficiales
Los registros gubernamentales también pueden presentar errores o no estar actualizados. Además, los usuarios internacionales enfrentan barreras significativas para acceder a estos registros, como restricciones geográficas o dificultades para realizar pagos.
Por error en los sistemas de los registros, una sociedad puede aparecer como activa sin estarlo o bien, la usurpación o suplantación de su identidad puede haber sido reportada a autoridades sin que tal hecho aparezca reflejado en ninguna alerta, por lo que aparecerá desapercibida en cualquier verificación.
4. Particularidades de algunos países
En ciertos países, como también en México, los estafadores pueden utilizar prestanombres o información de sociedades reales, lo que complica aún más la verificación. Además, no siempre es posible acceder a plataformas de consulta oficiales desde el extranjero ni acceder a registros oficiales sin contar a la vez con el número de registro federal de contribuyentes (RFC).
La plataforma de consulta del gobierno mexicano es muy completa pero también muy compleja, por lo que a veces la verificación no será posible por quienes no cuenten con los conocimientos para usarla.
5. Falta de respuesta de agentes o representantes legales
En muchos casos, es necesario contactar directamente a los agentes registrados para confirmar la validez de la empresa y la operación. Sin embargo, la falta de respuesta por parte de estos representantes puede crear una incertidumbre que beneficia a los estafadores y quienes justamente por ello utilizan tácticas de alta presión para lograr que las víctimas realicen pagos incluso antes de haber podido finalizar una verificación exhaustiva.
6. La falta de malas reseñas no siempre es buena señal.
El proceso de verificación requiere que se haga una revisión de reseñas en las redes y en internet. La inexistencia de reseñas negativas no asegura sin embargo que la oferta sea legítima o que quien la hace sea confiable. Existen portales que muestran como confiables a empresas que, en realidad, no lo son, solo porque no hay reportes de estafas en ese portal o porque los resultados de búsqueda no las clasifican como fraudulentas.
La máxima que debe guiarle es que si su oferente o inversionista no aparece reseñado en las redes o en internet o bien tiene malas reseñas, entonces le conviene declinar la negociación.
7. Sitios web fake
Los estafadores normalmente crearán sitios web que darán la sensación que corresponden a sociedades reales. Son normalmente páginas bastante básicas pero generan la impresión de confianza.
Es un error, confiar la verificación solo al sitio web de quien ha hecho la oferta.
8. Restricción de información por las instituciones financieras
La verificación de la existencia real de un fideicomiso por parte de la institución financiera donde los estafadores afirman haber constituido la misma a favor del propietario es sumamente difícil por las disposiciones que regulan el secreto bancario. Por otra parte, la efectividad de la verificación y confiabilidad de la misma depende muchas veces que se haga de manera presencial en la respectiva institución, lo cual la mayoría de las veces no es posible.
Quienes no son residentes en México o USA deben ser especialmente cautelosos
Sin perjuicio de las limitaciones que presenta la verificación para todos los propietarios de tiempos compartidos, quienes residen fuera de México y Estados Unidos enfrentan dificultades adicionales para realizar las verificaciones mínimas necesarias y por tanto corren probablemente un riesgo más elevado de ser víctimas de estafas que los que son residentes. La distancia geográfica y la falta de conocimiento del mercado local dificultan la verificación de la legitimidad de las ofertas y la autenticidad de la documentación presentada por los estafadores.
Estas circunstancias particulares hacen necesario que los propietarios no residentes sean incluso mas cautelosos en la verificación de la autenticidad o legitimidad de la operación planteada y que deban ser extremadamente estrictos en la consideración del negocio.
Reflexión final
La verificación es una herramienta poderosa, pero su eficacia depende de cómo se utilice y de qué tan estrictos seamos al analizar los resultados. Más allá de cualquier oferta inicial, es crucial recordar que las decisiones informadas y basadas en hechos son la mejor defensa frente a estafas en la reventa de tiempos compartidos.
No considere realizar el negocio basado únicamente en las verificaciones que haya podido hacer. Normalmente sus resultados no serán determinantes o concluyentes para indicar que no se trata de una estafa. Las herramientas disponibles no son infalibles y, en muchos casos, proporcionan una falsa sensación de seguridad.
En la medida que el valor de su propiedad lo justifique, considere buscar la asesoría de expertos para tomar decisiones informadas. Por encima de todo, adopte una actitud de escepticismo y cautela antes de proceder con cualquier oferta que parezca demasiado buena para ser verdad.