Los sesgos cognitivos operan en nuestra contra

Los Sesgos Cognitivos y su influencia en la Interacción con Estafadores

¿Cómo nuestros cerebros nos hacen caer en las trampas de los estafadores?

¿Te has preguntado por qué a veces caemos en las estafas, aunque parezca obvio que algo no anda bien?

Para entender mejor cómo caemos en las trampas de los estafadores, es crucial conocer el papel que juegan los sesgos cognitivos. Estos sesgos son atajos mentales que nuestro cerebro utiliza para procesar información rápidamente, pero que pueden distorsionar nuestra percepción y juicio, especialmente cuando interactuamos con estafadores quienes saben perfectamente como explotarlos a su favor y en contra nuestra.

No hay nadie que esté libre totalmente de experimentar esos sesgos cognitivos y por tanto caer víctima de las trampas de los estafadores.

De hecho, en materia de propiedades de tiempo compartido es muy probable que en su adquisición también haya influido alguno de los sesgos cognitivos que nos afectan. Los más comunes que  influyen en nuestras decisiones y son aprovechados por los estafadores comprenden entre otros:

  1. Sesgo de Confirmación.- Es aquel que ocurre cuando buscamos, interpretamos y recordamos información de manera que confirme nuestras creencias preexistentes. En el contexto de una estafa, este sesgo puede llevarnos a ignorar señales de alerta porque deseamos que la oferta sea legítima. Por ejemplo, si creemos que hemos encontrado una oferta increíble para vender nuestro tiempo compartido, podríamos ignorar cualquier signo de advertencia que sugiera lo contrario. Este sesgo hará que permanentemente sigamos buscando justificaciones y razones para seguir con un negocio que, objetivamente considerado, presenta señales de alarma que deberían hacer que lo declinemos.
  2. Sesgo de Anclaje.– Este sesgo se refiere a nuestra tendencia a depender demasiado de la primera información que recibimos (el «ancla») al tomar decisiones. Los estafadores suelen aprovechar este sesgo proporcionando una oferta inicial atractiva que se convierte en nuestro punto de referencia. A partir de ese momento, cualquier información adicional se interpreta en relación con esa oferta inicial, lo que puede llevarnos a tomar decisiones irracionales.
  3. Sesgo de Aversión a la Pérdida.- La aversión a la pérdida es la tendencia a preferir evitar pérdidas en lugar de obtener ganancias equivalentes. ¿Preferirías ganar USD 100 o evitar perder USD 100? La mayoría elegiría evitar la pérdida. Los estafadores usan este miedo para crear un sentido de urgencia y hacernos creer que nos perderemos una gran oportunidad si no actuamos rápido. Esto puede llevarnos a actuar sin tomar el tiempo necesario para verificar la autenticidad de la oferta.
  4. Sesgo de Optimismo.- El sesgo de optimismo nos lleva a subestimar las probabilidades de experimentar eventos negativos. Podemos creer que somos menos propensos a ser estafados en comparación con otros. Este sesgo puede llevarnos a bajar la guardia y no tomar las precauciones necesarias.

Estrategias para Mitigar el Impacto de los Sesgos Cognitivos

  1. Educación: Conocer la existencia de estos sesgos y la posibilidad que los mismos operen en nuestra contra y faciliten la labor de los estafadores puede ayudarnos a cuestionar nuestras intuiciones y actuar con la cautela necesaria para evitar a los estafadores. Recordar que independientemente de la inteligencia y nivel de educación nadie está libre totalmente de los sesgos cognitivos.
  2. Sé escéptico: No creer en todo lo que se nos dice o promete. Es necesario confirmar y verificar la autenticidad de las ofertas y las credenciales de las personas que te contactan. Es necesario utilizar múltiples fuentes y consulta con expertos si es necesario.
  3. Decisiones Racionales: Trata de tomar decisiones basadas en hechos y evidencia, en lugar de emociones y primeras impresiones. Tómate el tiempo necesario para analizar todas las opciones disponibles.
  4. Segunda Opinión: Busca la opinión de amigos, familiares o profesionales antes de tomar decisiones importantes o mejor, nunca tomes una decisión de estas en solitario sino adopta la costumbre de tomarla en conjunto con otro. Los terceros pueden ofrecerte una perspectiva más objetiva y ayudarte a identificar posibles señales de advertencia.

Recuerda: Tu cerebro es una herramienta poderosa, pero también puede ser engañado. Al entender estos sesgos cognitivos, puedes protegerte mejor de las estafas. ¡Mantente informado, sé escéptico y no dejes que los estafadores te engañen!